Calle la Marina, 11, Ares del Bosque (Alicante) 966 860 307

El jardín de los santos ( Penáguila)

No se conocen detalles históricos concretos de la historia del jardín, que fue hecho durante la segunda mitad del siglo XIX por Joaquim Rico (terrateniente del pueblo y hombre culto, con grandes conocimientos botánicos y amigo del pintor Cabrera) en una finca rústica que poseía esta familia ya desde finales del siglo XVIII, finca que recibe el nombre de Santos.

El Jardín de Santos, municipal desde 1987, junto al camino de cipreses que lleva del pueblo al paraje, constituye el sitio más insólito que se pueda esperar encontrarse en medio de la montaña. Se trata de un precioso jardín botánico con especies valiosas como tejos, cedros del Líbano, pinos pinsapo o magnolis. En el Jardín de Santos se encuentra, entre parterres y miradores, un laberinto y un estanque.

Horario para visitarlo:

Horario de verano                                                                          Horario de Invierno

(hasta 30 de Octubre)                                                                   (a partir del 30 de Octubre)

Sábados, Domingos y Festivos                                                 Sábados, Domingos y Festivos

11:00- 14:00 horas                                                                       11:00- 14:00 horas

18:00-20:00 horas                                                                       16:00-18:00 horas

Ruta fitoclimática en el barranco de Aladrach

La ruta fitoclimática es un magnífico instrumento de interpretación ambiental para conocer los efectos del cambio climático sobre la vegetación.

La ruta empieza en el paseo de cipreses, a la salida del pueblo de Penàguila, y discurre por el sombrío del barranco de Aladrach hasta desembocar, de nuevo, en el paseo de cipreses cerca de la entrada del Jardín de Santos, después de un paseo de 45 minutos.

A lo largo de esta se ha recreado y favorecido las comunidades vegetales con los clases más adaptados a determinados cambios fitoclimáticamente trascendentales. Recorrer la ruta fitoclimática brinda una ocasión para meditar sobre el hecho de que la vegetación que nos rodea no es inmutable y que el cambio climático es un factor que lo alterará y la convertirá en algún de los paisajes mostrados en la ruta.